Al visitar la península de Yucatán en el sureste de México se esperan muchas maravillas, entre ellas se encuentran los paisajes paradisiacos, cenotes con agua cristalina, vegetación desbordante, música tropical, fachadas de distintos colores y por supuesto, sorpresas culinarias. Mérida, la capital de Yucatán es infinita en sorpresas para los sentidos. Una ciudad que enamora por su atmósfera colonial pero con palmeras en cualquier vista que se tenga. Es perfecta para unas vacaciones familiares, con amigos o en pareja. Es una ciudad que tiene un centro lleno de cultura Arquitectónica y una nueva parte de la Ciudad que crece con nuevas altas construcciones y una vida nocturna que es comparable con las grandes ciudades.
El famoso Paseo Montejo está formado por una gran avenida con casonas antiguas en perfecto estado, adecuadas para ser restaurantes, empresas, bancos y hoteles, conservando las fachadas originales y siempre habitada por habitantes y extranjeros. Los domingos cierran esta Avenida para los ciclistas, ya sea que tengan su propia bicicleta o renten en alguno de los puntos que montan en la misma Avenida. Después de recorrer gran parte de la Ciudad de una manera dinámica, segura y divertida se puede escoger entre un gran abanico de opciones culinarias. Desde la tradicional y deliciosa comida yucateca hasta restaurantes internacionales.
Una de esas opciones es el exquisito restaurante Apaola en el Centro de la Ciudad de Mérida. Este restaurante ofrece un espectacular menú oaxaqueño, una gran opción por si la comida yucateca fue suficiente durante la visita, o si se tiene curiosidad sobre esta comida. La gente que lo visita son habitantes de Mérida y la mayoría son extranjeros. El menú está formado por los mejores vinos, tlayudas, y sorprendentes combinaciones de la tradicional cocina oaxaqueña con toques contemporáneos que son un paraíso para el paladar. Es un lugar imperdible en la Ciudad de Mérida. Por las noches tiene un ambiente romántico que te llevará a tener una sobremesa de largas horas acompañados de música, buenos tragos y un gran ambiente!